miércoles, octubre 05, 2005

Una llamada inesperada

Hoy llego de trabajar y me estaba tomando un cafè .
Y suena el telefono.
Era un ex mio.
Me dio mucha alegria escucharlo despues de casi 5 años.
Habìa conseguido mi telèfono .
Hablamos casi 1 hora.
De recuerdos, de cosas vividas, de proyectos, de presente , de futuro.
Lo mas dificil fue cuando percibì entre lineas una propuesta de comenzar una relaciòn asi a la distancia.
Eso fue lo mas dificil, porque ha pasado el tiempo y sè que el momento es otro, la realidad es otra.
Supongo que a todos nos pasa, que cuando uno deja una relaciòn , deja de compartir momentos con una persona , aunque a veces sepuede tener una relacion sin haber compartido nada ji ji ji.
Decìa que uno deja una relacion y si pasa mucho tiempo,nos queda en la memoria la persona como era en ese momento.
Como si los años no hubieran pasado .
Yo siento que en todo este tiempo he cambiado bastante.
Me he vuelto mas sereno, mas reflexivo.
Puedo compartir momentos y lo hago.
Pero no me comprometo, osea mis tiempos son mios.
Puede sonar un poco egoista, pero no es ese el sentido.
No es que los demas no me importen nada.
Simplemente que no dejo de hacer lo que yo siento , que tengo un ritmo que no quiero que nadie me cambie.
A lo largo de la vida supongo que todos hemos tenido varias relaciones, de parejas, de amigos , pero ese tiempo no es hoy el mismo.
Hay un momento para cada cosa.
Que en un momento hayamos estado con alguien no significa que eso pueda volver a repetirse, por lo que decia antes , el momento es otro.
Simplemente es eso.
Ha habido circunstancias que hicieron que eso se terminara.
Las segundas partes nunca fueron buenas .
Esa es una regla del cine que nunca me ha fallado.
Que haya quedado una relacion de amigos, me parece muy puro y muy sano.
Me costo decirselo , pero se lo dije.
Si èl lo entendio , que ojala haya sido asi, me queda lo reconfortante de haber actuado desde el corazòn.

Suena en mi MP3 " Salvador Dali" de Mecano


Hay quien arroja un vidrio en la arena, pero tambièn hay quien se agacha a recogerlo
Josè Narosky